Bebe al menos dos litros de agua al día, eso facilitará la eliminación de toxinas e hidratará tu cuerpo devolviéndole a tu piel la elasticidad. Se recomienda no beber grandes cantidades de golpe, si no ir dosificándola para hidratarte durante todo el día.
Lleva una dieta sana y equilibrada, rica en frutas (dos o tres piezas al día) y verduras. Toma todos los días alimentos diuréticos como la cebolla, la alcachofa, los espárragos, el apio, las espinacas, el pepino, los puerros, la manzana y la piña.
Evita el consumo de grasas, dulces y modera la sal.
Haz una dieta rica en fibra, comiendo legumbres y verduras.
Consume cereales integrales, que te sacian y ayudan a tu función intestinal.
Prescinde de los alimentos que producen gases, como la coliflor o las habas, y por supuesto de las bebidas carbonatadas.
Limita el consumo de salsas, conservas y especias, así como la ingestión excesiva de café (una taza diaria de un café natural de calidad es saludable)
Evita el alcohol. El alcohol ayuda a fijar las grasas que consumimos.
Haz ejercicio moderado todos los días. No lleves tu cuerpo al límite un solo día y luego lo dejes durante una semana porque tienes agujetas. Es más saludable empezar poco a poco y ser constante. El ejercicio aeróbico, como correr, hacer bicicleta o spinning nos ayuda a eliminar muchas toxinas a través del sudor.
La natación es un ejercicio completo y muy recomendable para deshacernos de la grasa localizada, pero debes combinarla con algún tipo de ejercicio reafirmante y estiramientos.
Una ducha fría (a unos 20ºC) por las mañanas es ideal para reafirmar la piel y mantenerla tersa. No es recomendable si estás menstruando.
Usa a diario una buena crema anticelulítica (los tratamientos de frío-calor suelen ser los más eficaces) y aplícala masajeando suavemente con movimientos circulares y siempre en dirección ascendente, por piernas, caderas y glúteos)
Ten paciencia y no te desanimes en la primera semana. Los tratamientos para combatir la celulitis son largos. A corto plazo evitan que la grasa se siga acumulando, pero es a largo plazo donde verás los resultados en la eliminación de la que ya tenías.
IMPORTANTE: En ningún caso deberá contradecir las indicaciones de su médico.
Lleva una dieta sana y equilibrada, rica en frutas (dos o tres piezas al día) y verduras. Toma todos los días alimentos diuréticos como la cebolla, la alcachofa, los espárragos, el apio, las espinacas, el pepino, los puerros, la manzana y la piña.
Evita el consumo de grasas, dulces y modera la sal.
Haz una dieta rica en fibra, comiendo legumbres y verduras.
Consume cereales integrales, que te sacian y ayudan a tu función intestinal.
Prescinde de los alimentos que producen gases, como la coliflor o las habas, y por supuesto de las bebidas carbonatadas.
Limita el consumo de salsas, conservas y especias, así como la ingestión excesiva de café (una taza diaria de un café natural de calidad es saludable)
Evita el alcohol. El alcohol ayuda a fijar las grasas que consumimos.
Haz ejercicio moderado todos los días. No lleves tu cuerpo al límite un solo día y luego lo dejes durante una semana porque tienes agujetas. Es más saludable empezar poco a poco y ser constante. El ejercicio aeróbico, como correr, hacer bicicleta o spinning nos ayuda a eliminar muchas toxinas a través del sudor.
La natación es un ejercicio completo y muy recomendable para deshacernos de la grasa localizada, pero debes combinarla con algún tipo de ejercicio reafirmante y estiramientos.
Una ducha fría (a unos 20ºC) por las mañanas es ideal para reafirmar la piel y mantenerla tersa. No es recomendable si estás menstruando.
Usa a diario una buena crema anticelulítica (los tratamientos de frío-calor suelen ser los más eficaces) y aplícala masajeando suavemente con movimientos circulares y siempre en dirección ascendente, por piernas, caderas y glúteos)
Ten paciencia y no te desanimes en la primera semana. Los tratamientos para combatir la celulitis son largos. A corto plazo evitan que la grasa se siga acumulando, pero es a largo plazo donde verás los resultados en la eliminación de la que ya tenías.
IMPORTANTE: En ningún caso deberá contradecir las indicaciones de su médico.
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